
Muy preferible es osar y determinarse a llevar adelante empresas magnánimas, encaminadas a gloriosos triunfos, aun tropezando, a veces, con el escollo del fracaso, a vivir como esos pobres espíritus, que ni penan, ni gozan, envueltos siempre en un crepúsculo gris, donde no se concibe ni caída ni victoria
Theodore Roosevelt
|
|
|
|
|
|
|